2. VALORES EN LOS ADOLESCENTES
Los padres transmitan los hijos nuestras creencias y actitudes, les
enseñamos unos valores que para nosotros son importantes. Con
nuestros hábitos, estilos de vida y comportamientos les estamos
mostrando el ejemplo de cómo hay que comportarse. Por eso es
importante que nos preguntemos sobre nuestras propias
creencias y actitudes, valores, hábitos de vida, sobre cómo nos
comportamos, y cómo esto puede estar influyendo en nuestros
hijos
Los valores son aspectos concretos a los que les damos una
importancia especial, de modo que pasan a orientar lo que
hacemos. Por ejemplo, la salud puede ser un valor
dominante para una persona, mientras que otros pueden
valorar el dinero por encima de otras cosas, el éxito, la
inteligencia, la unión de la familia, etc. Las persona definimos
lo que está bien o mal en función de los valores que
tenemos.
Las creencias son las ideas o convicciones que las personas
tenemos acerca de las cosas y que consideramos como
verdades indudables. Podemos tener creencias más o
menos racionales o irracionales. Por ejemplo, si la salud es
un valor importante para nosotros, podemos tener creencias
irracionales respecto a nuestra propia salud “seguro que voy
a enfermar, estoy predestinado para ello” o creencias más
ajustadas a la realidad “la enfermedad le puede tocar a
cualquiera”.
La actitud es la disposición que tenemos a pensar
3. comportarnos de un modo determinado. Las actitudes
pueden ser más positivas o negativas, optimistas o
pesimistas. Siguiendo con el ejemplo de la salud, una actitud
positiva sería el pensar “puedo hacer cosas para mejorar mi
salud”, mientras que una actitud negativa podría ser “es
mejor no hacerse pruebas, porque si estás enfermo no
puedes hacer nada para remediarlo y cuanto más tarde te
enteres mejor”.
FORMACION DE LOS VALORES
Se ha podido constatar que la conducta de los jóvenes puede verse
peligrosamente afectada por el debilitamiento de los valores morales; de
ahí la necesidad de atender a la formación, fortalecimiento y desarrollo de
los valores en las nuevas generaciones.
APLICANDO LOS VALORES
Toda labor de educación y enseñanza sólo adquiere
4. sentido cuando se tiene a la vista los fines y objetivos.
Una buena educación es haber aprendido a disfrutar
haciendo el bien y a sentir disgusto haciendo el mal.
El conocimiento propio es la puerta de la verdad. Cuando
falta no se puede ser sincero con uno mismo.
Hay personas que sobresalen por su constancia y
dedicación al trabajo. Esto hace que superen a otros
compañeros que poseen un a capacidad intelectual
bastante más alta .
5. RECOMENDACIONES
1.-La experiencia demuestra que en la enseñanza de valores, el profesor
reafirma aquellos en los que cree, y al ejercitarse en ellos propicia que la
vida de la escuela se haga corresponder con los enunciados formales.
2.-Atender y respetar los distintos ritmos, estilos y necesidades de
aprendizaje de todos y cada uno de los alumnos y propiciar el
gusto por aprender y saber más.
CONCLUSIONES
Con esto hemos llegado a la conclusión de que debemos practicar
todos lo valores de la adolescencia y así enseñar a las
generaciones siguientes