El documento describe las funciones del lenguaje que se utilizan con más frecuencia en la publicidad. La función apelativa o conativa, que intenta llamar la atención y persuadir al receptor para que compre el producto, es la más predominante. La función expresiva o emotiva también se usa para comunicar la emoción de poseer o disfrutar del producto. La función poética somete el lenguaje publicitario a un tratamiento estilístico no para crear belleza literaria sino para vender el producto de manera eficaz.