La coquización es un proceso de craqueo térmico que se utiliza para obtener gasolina y fracciones de destilación intermedia a partir de hidrocarburos. Durante la coquización, el hidrógeno se elimina de la molécula de hidrocarburo, dejando un residuo de carbono casi puro llamado coque. El coque se usa principalmente en la metalurgia, y las propiedades coquizantes de un carbón se determinan a través de ensayos que simulan las condiciones de un horno de coquización.