El documento ofrece estrategias para animar a los niños pequeños a la lectura. Propone crear curiosidad sobre los temas de los libros antes de leer, involucrar a los niños haciendo preguntas durante la lectura y dramatizando la narración, y después fomentar su imaginación haciendo preguntas sobre la historia y animándolos a contar cuentos similares.
Estrategias de animación a la lectura para los más pequeños
1. ESTRATEGIAS DE ANIMACIÓN A LA LECTURA PARA LOS MÁS
PEQUEÑOS
Para trabajar con Franklin, Buenas noches y Torre naranja.
Previo a la lectura: El deseo de leer y la curiosidad por conocer
Consideraciones:
· La lectura sólo es agradable cuando es deseable.
· Se desea lo que uno quiere conocer o lo que sólo se conoce en parte.
· Aquello que se conoce no necesariamente es lo que rodea a los niños, lo habitual.
· La lectura debe estar en relación con lo que el niño conoce y desea conocer más.
· Hay que abrir un abanico de posibilidades por conocer.
Actividades:
· Averiguar qué les interesa en ese momento.
· Presentar los temas de varios cuentos dentro de ese rango y pedirles que escogen aquel
que quisieran leer.
· Pedir que imaginen al personaje principal.
Durante la lectura: Envolver al niño con la narración
· Mientras se lee el cuento, mostrar las ilustraciones.
· Interrumpir la lectura, cuantas veces sea necesario, si los niños hacen preguntas.
· Explicar todo aquello que suscite la curiosidad de los niños, sin adelantar la trama del
libro.
· Mantener el suspenso, dosificando la velocidad de la lectura.
· Dramatizar la lectura adoptando un tono de voz por cada personaje y subrayando con
la entonación y el volumen de la voz los momentos más importantes y tensos.
· Desde muy niños los estudiantes deben ser acostumbrados a gozar de la materialidad
del texto. Por ejemplo: deben leer el poema con ritmo.
(diferencias entre recitado y declamado, perversión).
· El ritmo transmite por sí mismo significado. Obviamente impreciso, por eso más
motivador, más sugerente.
2. · La prueba de que el ritmo por sí sólo nos dice algo son las letanías, en el caso de las
canciones las letras que no entendemos, y eso los ayuda a dormir, mejor aún, a soñar.
Ejemplo: recitarles a los niños.
Después de la lectura: Proyectar la imaginación del niño más allá de la lectura
· Preguntar si les ha gustado el cuento.
· Preguntar si conocen cuentos parecidos.
· Preguntar qué hubiera pasado si...
· Animarlos a opinar sobre la conducta de los personajes.
· Preguntar si alguien quiere contar un cuento que se parezca al que han leído.
· Recuerde, la lectura despierta en los niños la imaginación. La lectura es por lo tanto
creación. Al punto que la lectura en los niños sólo es completa si provoca la emulación,
la creación.