El Salmo 88 expresa el profundo sufrimiento y desaliento de alguien que ha experimentado los terrores de Dios por mucho tiempo. A pesar de enumerar los atributos de Dios como amoroso y fiel, la persona siente que esos atributos no se manifiestan en su vida. El salmo plantea la tensión entre la fe en Dios como salvador y la dura realidad de la experiencia. Aunque desesperanzado, el salmista sigue orando a Dios, aferrándose a su fe a pesar de la oscuridad que lo
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
Salmo 88
1. SALMO 88
La mención repetida de los muertos, el sepulcro, las tinieblas, aparentan proponer que el tema es orar frente a la
realidad de la muerte que se vive como drástica y carente de sentido.
Sin embargo, no aparece en el salmo la idea de que la persona sufre porque sabe que va a morir. Se presenta como
alguien que sufre desde hace tiempo (v.16), los “terrores e iras de Dios” y hace referencia a sufrimientos concretos
que ha debido soportar, con una gran variedad de verbos que hacen alusión a ello.
Veo entonces una tensión cuando partiendo de su fe, enumera los atributos de Dios: su amor, su fidelidad, su
justicia y sus maravillas y el resto del salmo, donde se muestra que en la vida de esta persona todos esos atributos
de Dios no se verifican.
Posiblemente ya ha experimentado a Dios como salvador, pero en su presente y a lo largo de su vida que comienza
en la juventud (v.16), ya no ocurre. El conflicto que el Salmo plantea es entonces, entre la fe y la experiencia
concreta, que la contradice en su totalidad, haciendo que todo el furor divino lo lleve a pensar que está al borde del
abismo de la muerte. No parece estar por morir, pero si acercándose a la muerte después de un largo sufrimiento.
Entonces, ve la vida sin sentido, y la Fe en el Dios que los salva y que reconoce, “manifiesta maravillas” y “es
misericordioso” es duramente cuestionada.
La invocación inicial “Dios de mi salvación”, da el tono al salmo. Es una persona que probablemente ha
experimentado la salvación y de ella le viene la fuerza esperanzada para seguir clamando durante la noche larga de
la prueba. Todo es oscuridad, y la misma desdibuja sus certezas y con ellas el rostro de su Dios. Pero nuevamente,
desde la tiniebla que lo rodea, desde el borde del abismo en que se siente, vuelve a elevar su clamor. No pide
perdón, ni salvación, su clamor se reduce al mínimo: “Inclina tu oído a mi clamor”
El Salmo 88 expresa tristeza y desaliento y quizá fue compuesto en un momento de intenso sufrimiento físico y
mental. Se oye desesperanzado, con solamente un pequeño rayo de luz expresado en la confianza del verso 1: "Oh
Jehová, Dios de mi salvación". Es un largo lamento de infinita tristeza que culmina con la palabra tinieblas. “Noche
oscura del alma, cuando se está tan triste antes, como después de orar” Pastor Alejandro Peluffo
El que ora sufre, teme morir, ora en busca de alivio; parece no haber en él, ninguna esperanza de recibir respuesta
a su clamor. Sin embargo, se mantiene a pesar del desaliento, aferrado a Dios su salvador. Esa experiencia
aparenta ser la única luz de su existencia, la que le da la esperanza y fuerzas para seguir rogando ser oído, durante
el largo tiempo de su prueba. (v. 1, 2, 9, 13) y reconoce la amante misericordia de su salvador, su fidelidad, su poder
y su justicia (v. 10-12), y no cesa de orar (v. 13).
No tengo dudas que la fe de Hemán fue totalmente validada ante los ojos de Dios porque, aunque no vislumbra
ningún alivio, permanece “Firme en Dios ante el dolor”.