2. La política es la movilización de voluntades ajenas que
requiere dos elementos básicos: Comunicación y
Seguimiento.
La comunicación política puede definirse como “El tipo
particular de mensajes y de informaciones que circulan
dentro del sistema político y que son indispensables
para su funcionamiento, ya que condicionan toda su
actividad, desde la formación de las demandas hasta
los procesos de conversión, y las respuestas del mismo
sistema” (Panebianco, 1982).
3. Para Moragas (1979), la comunicación política está
compuesta por :
Sistemas de comunicación como instrumentos, no
propagandísticos, sino organizativos de la actividad
política y administrativa.
Utilización política de la industria cultural, es decir, uso y
fines políticos de la cultura de masas.
Comunicación masiva y su papel en orden a mantener
una conducta adecuada al 'statu quo' político y
económico.
Recursos comunicativos como sistema de oposición al
poder establecido (contrainformación, comunicación de
resistencia, comunicación alternativa).
Procesos concretos de persuasión política (referéndums,
elecciones, campañas de sensibilización, etc.)”.
4. En los regímenes democráticos, la comunicación es
continua entre la elite y la opinión pública.
Los mensajes parten de la elite a las masas con el objeto de
solicitar la legitimación, y de las masas a la elite,
aunque con mayor dificultad y en menor cantidad.
En los regímenes autoritarios, el flujo de comunicación
es continuo entre las elites y los círculos gobernantes.
Y es igualmente continuo entre la elite y la masa de
ciudadanos, ya que son pocos los canales que transmiten los
mensajes en dirección opuesta.
En los regímenes totalitarios se compacta cantidad de
comunicación que va desde la elite hasta la masa.
5. Democracias fuertes requieren públicos
interconectados por flujos de información en
los que los ciudadanos puedan debatir
asuntos públicos y tomar decisiones libres y
responsables (Orozco, 2011)
La información con mayor potencial
deliberativo pone cuidado en la forma como
se nombran los problemas. Si las personas no
establecen vínculos entre estos y sus
preocupaciones, no llegarán a la acción
colectiva.
6. El simple rol de proveedor de información que
asumen algunos medios no es suficiente.
Es necesario interpelar a los ciudadanos sobre lo
que cada uno puede aportar a la sociedad desde
su posición específica.
“Nuevos medios” modelos colaborativos
representan un amplio potencial en términos de
interacción, sin embargo en muchas ocasiones no
hay deliberación sino una serie de comentarios
aislados.
Trabajo con la sociedad garantiza un trabajo
periodístico más rico en fuentes y puntos de
vista.