La investigación etnográfica puede ser una alternativa viable para que los maestros generen conocimiento a través de la investigación educativa. Este tipo de investigación reduce la brecha entre la teoría y la práctica al permitir que los maestros apliquen metodologías como la observación y entrevistas para comprender mejor el contexto educativo desde la perspectiva de los estudiantes. Además, la etnografía beneficia a los maestros al proporcionar información que les ayuda a mejorar sus técnicas de enseñanza y evaluación.