El documento describe la importancia del amor en el matrimonio según la Biblia y San Pablo. Explica que el amor debe ser paciente, servicial y no celoso, y que el matrimonio es una unión sagrada entre un hombre y una mujer que forma la base de la familia y la sociedad. Advierte sobre los peligros como la poligamia o el divorcio que amenazan el amor conyugal y la institución del matrimonio.

1. “No es bueno que el hombre esté solo. Le voy a hacer
alguien que sea una ayuda adecuada para él”. (Gen
2,18) “Por eso el hombre deja a su padre y a su madre
y para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como
un sola persona” (Gn 2,18)

2. • San Pablo invita a los esposos a amarse
mutuamente, Ef 5,25: “los esposos amen a sus
esposas como Cristo ama a su Iglesia y se
entregó a sí mismo por ella”. El mismo San
Pablo nos describe en 1ª Corintios 13 las
características del amor: “el amor es paciente,
es servicial, el amor no tiene envidia, no se
alegra de la injusticia, se alegra con la verdad.
Todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta”.

3. EL AMOR ES UN PROCESO
• El amor es gratuito:
• El amor es generoso:
• El amor es sacrificado:
• El amor es fiel:
• El amor es limpio:

4. Peligros:
• Poligamia – divorcio – amor libre - Moda –
Aventura – Instinto - Discordias – Dominio –
Agresividad – infidelidad – celos – discusiones
– peleas – odios – separación – hedonismo –
egoísmo – uniones homosexuales – aborto -

5. • Pues de esta unión conyugal procede la familia, en que
nacen los nuevos ciudadanos de la sociedad humana,
que por la gracia del Espíritu Santo quedan
constituidos por el bautismo en hijos de Dios, para
perpetuar el pueblo de Dios a través de los tiempos.
• El hogar lo constituyen los padres y los hijos y como su
nombre lo indica es una fuente de amor, “hogar”,
“fogón”, “calor”, “pasión”, estas palabras nos indican
todo aquello que debe contener un “nido” de amor
permanente, que está alimentado por la Gracia de
Dios.

6. • “La familia cristiana proclama muy alto tanto
las presentes virtudes del Reino de Dios, como
la esperanza de la vida bienaventurada. Y así,
con su ejemplo y testimonio, acusa al mundo
de pecado e ilumina a los que buscan la
verdad”. (LG. 35)

7. El carácter sagrado del matrimonio y de la
familia (G.E. 48)
• “…., del acto humano con que los cónyuges
mutuamente se entregan y aceptan, surge una
institución estable, por ordenación divina,
incluso ante la sociedad; este vínculo sagrado,
con miras al bien, ya de los cónyuges y su
prole, ya de la sociedad, no depende del
arbitrio humano.”

8. El progreso del matrimonio y la
familia, obra de todos
• “Es deber de los padres el de los tutores,
cuando los más jóvenes van a fundar una
familia, ofrecérseles como guías, ayudándolos
con la prudencia de sus consejos -que ellos
deberían oír con gusto-, pero evitando con
cuidado el forzarles con ningún género de
coacción directa o indirecta a abrazar el
matrimonio o a elegir una determinada
persona”. GE. 52