Este documento contiene 18 descripciones físicas de personajes literarios. Las descripciones detallan características como el color de cabello, ojos, nariz, boca, dentadura, estatura y complexión de cada personaje. Proporcionan detalles visuales para ayudar al lector a imaginarse la apariencia de los personajes descritos en las obras literarias mencionadas.
en este trabajo encontramos varios aspectos como el argumento, personajes principales y secundario, contexto, inferencias basadas en citas textuales del libro, relación causa-efacto entre otras
en este trabajo encontramos varios aspectos como el argumento, personajes principales y secundario, contexto, inferencias basadas en citas textuales del libro, relación causa-efacto entre otras
ROMPECABEZAS DE ECUACIONES DE PRIMER GRADO OLIMPIADA DE PARÍS 2024. Por JAVIE...JAVIER SOLIS NOYOLA
El Mtro. JAVIER SOLIS NOYOLA crea y desarrolla el “ROMPECABEZAS DE ECUACIONES DE 1ER. GRADO OLIMPIADA DE PARÍS 2024”. Esta actividad de aprendizaje propone retos de cálculo algebraico mediante ecuaciones de 1er. grado, y viso-espacialidad, lo cual dará la oportunidad de formar un rompecabezas. La intención didáctica de esta actividad de aprendizaje es, promover los pensamientos lógicos (convergente) y creativo (divergente o lateral), mediante modelos mentales de: atención, memoria, imaginación, percepción (Geométrica y conceptual), perspicacia, inferencia, viso-espacialidad. Esta actividad de aprendizaje es de enfoques lúdico y transversal, ya que integra diversas áreas del conocimiento, entre ellas: matemático, artístico, lenguaje, historia, y las neurociencias.
2. 1
Era un hombrón con grandes bigotazos
blancos, patillas de hacha del mismo pelo
y una cadena gorda en el chaleco; Andaba
con un sombrero grandón y paso así
balanceante, como si fuera a caerse o a
darle un empujón al primero que le
viniera con bromas. Era un viejo duro y
algo torcido, que echaba los pies para
adentro, unos pies grandísimos y altos,
como de madera.
(Federico García Pavón, Cuentos I)
3. 2
Este que veis aquí de rostro, de cabello castaño,
frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y nariz
corva, aunque bien proporcionada, las barbas de
plata que no hace veinte años que fueran de oro,
los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni
menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y
estos mal acondicionados y pero puestos porque
no tienen correspondencia los unos con los otros;
el cuerpo entre dos extremos, ni grande ni
pequeño, la color viva, antes blanca que morena,
algo cargado de espaldas y no muy ligero de pies;
este, digo, es el retrato del autor de “La Galatea” y
“Don Quijote de la Mancha.”
4. 3
No renunciaba a subir, a llegar cuanto más
arriba pudiese, pero cada día pensaba menos
en esas vaguedades de la ambición a largo plazo
propias de la juventud. Había llegado a los
treinta y cinco, y la codicia del poder era más
fuerte y menos idealista: se contentaba con
menos, pero lo quería con más fuerza, lo
necesitaba más cerca: era el hombre que no
espera, la sed en el desierto que abraza y se
satisface en el charco impuro sin aguardar a
descubrir la fuente que está lejos en lugar
desconocido. Sin confesárselo sentía a veces
desmayos de la voluntad y de la fe en sí mismo
que le daban escalofríos.”
Leopoldo Alas, Clarín, La Regenta
5. 4
En los pómulos había un ligero
encarnado(...)Los ojos, verdes. La nariz,
larga y recta. Los labios parecían
obligados a vivir comprimidos por la
barba que tendía a subir. La cabeza
pequeña y bien formada, de espeso
cabello negro, muy recortado,
descansaba sobre un robusto cuello
blanco, proporcionado al tronco y
extremidades del fornido canónigo.”
(Clarín , La Regenta)
6. 5
CALISTO: Comienzo por los cabellos. ¿Ves
tú las madejas de oro delgado que hilan en
Arabia? Más lindos son....Los ojos verdes,
rasgados, las pestañas largas: las cejas
delgadas y alzadas; la nariz mediana; la
boca, pequeña. Los dientes, menudos y
blancos; los labios colorados y gordezuelos;
el torno del rostro, poco más largo que
redondo; el pecho, alto(...) Las manos,
pequeñas en media manera; los dedos
largos, las uñas en ellos, largas y coloradas
que parecen rubíes entre perlas...
(Fernando de Rojas, Tragicomedia de Calisto
y Melibea)
7. 6
Era un tipo curioso el de Elizabide el
Vagabundo. Reunía todas las cualidades y
defectos del vascongado de la costa: era
audaz, irónico, perezoso, burlón. La
ligereza y el olvido constituían la base de
su comportamiento; no daba importancia
a nada, se olvidaba de todo.
(Pío Baroja, Elizabide el Vagabundo)
8. 7
Don Álvaro era alto, gallardo, vigoroso,
de un moreno claro, ojos y cabellos
castaños, de fisonomía abierta y noble,
y sus facciones de una regularidad
admirable. Tenía la mirada penetrante, y
en sus modales se notaba gran despejo
y dignidad al mismo tiempo.
(Enrique Gil y Carrasco, El Señor de Membibre)
9. 8
Su fisonomía no era agradable, distinguiéndose
por lo peluda...Bien decía doña Lupe que, así
como el primogénito se había llevado todos los
talentos de la familia, Nicolás se había adjudicado
todos los pelos de ella. Se afeitaba hoy y mañana
tenía toda la cara negra. Recién afeitado sus
mandíbulas eran de color pizarra. El vello le crecía
en las manos, los brazos, como la yerba en fértil
campo, y por las orejas y las narices le asomaban
espesos mechones. Diríase que eran las ideas que,
cansadas de la oscuridad del cerebro se asomaban
por los balcones de la nariz y las orejas a ver lo
que pasaban en el mundo.
(Benito Pérez Galdós, “Fortunata y Jacinta”)
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“La casa del boticario estaba a la salida
de pueblo, completamente aislada; por
la parte que miraba al camino tenía un
jardín rodeado de una tapia, y por
encima de ellas salían ramas de un laurel
verde oscuro que protegían algo la
fachada del viento del Norte. Pasando el
jardín estaba la botica...”
11. 10
Lo más importante del jardín del
sol era el pozo. Tenía un brocal de
piedra verde y un arco de hierro
forjado para la polea. La polea era
de madera y chillaba como una
golondrina. El cubo era también de
madera, sujeto por aros de hierro,
como las cubas, y pesaba mucho.
El pozo era muy hondo y tenía un
agua muy clara.
12. 11
«A la izquierda se abría la enorme boca de la cueva,
por la cual no se distinguían más que sombras. Al
acostumbrarse la pupila, se iba viendo en el suelo,
como una sábana negra que corría a todo lo largo de
la gruta, el arroyo del infierno, "Infernuco-erreca",
que palpitaba con un temblor misterioso. En la
oscuridad de la caverna brillaba, muy en el fondo, la
luz de una antorcha que agitaba alguien al ir y venir.
Unos cuantos murciélagos volaban a su alrededor;
de cuando en cuando se oía el batir de las alas de
una lechuza y su chirrido áspero y estridente.»
(Pío Baroja)
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«Mi padre se llamaba Esteban Duarte Diniz, y era
portugués, cuarentón cuando yo niño, y alto y
gordo como un monte. Tenía la color tostada y un
estupendo bigote negro que se echaba para
abajo. Según cuentan, le tiraban las guías para
arriba, pero, desde que estuvo en la cárcel, se le
arruinó la prestancia, se le ablandó la fuerza del
bigote y ya para abajo hubo que llevarlo hasta el
sepulcro. Yo le tenía un gran respeto y no poco
miedo, y siempre que podía escurría el bulto y
procuraba no tropezármelo; era áspero y brusco y
no toleraba que se le contradijese en nada, manía
que yo respetaba por la cuenta que me tenía.»
(CAMILO JOSÉ CELA)
14. 13
“Era un amplio y hermoso jardín, con
un suave y verde césped. Brillaban
aquí y allí lindas flores entre la
hierba, como estrellas, y había doce
melocotoneros que, en primavera, se
cubrían con una delicada floración
blanquirrosada y que, en otoño
daban hermoso fruto”.
(OSCAR WILDE)
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Platero es pequeño, peludo, suave; tan
blando por fuera, que se diría todo de
algodón, que no lleva huesos. Solo los
espejos de azabache de sus ojos son
duros cual dos escarabajos de cristal
negro.
JUAN RAMÓN
JIMÉNEZ
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“Era Evaristo todo un “buen mozo”. Alto, esbelto, muy
cuidadoso de vestir y de seguir la moda. En su rostro blanco y
sonrosado, de cutis fresco que parecía el de un niño, brillaban
unos ojos claros, de un verde azuloso o de un azul casi verde,
que tenían un gran número de admiradores y devotas no solo
por su belleza, si no también por su extraordinaria facultad
expresiva. Pero lo que más agradaba en él, era cierta
elegancia en los ademanes, cierta aristocrática displicencia,
cierta sonrisa propia y única, que usaba en todas las
situaciones y que en todas encajaba maravillosamente”.
(JOSE FELIX DE LA PUENTE)
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EL KAYAK
El kayak es un piragua de
competencia. Es muy ligera.
Es de forma alargada, con la
proa y la popa puntiagudas, el
remo tiene una pala en cada
extremo. Es una embarcación
muy cerrada, de que el
piragüista lleva las piernas
debajo de la cubierta.
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Don Mena, más conocido como “El poeta de la portería”, es un anciano
de cabellos blancos, tranquilo, pasivo y de exquisito conocimiento.
Ilumina la puerta de entrada de nuestro colegio y a nosotros mismos.
De gran intelecto literario y a la vez un gran exponente del arte poético,
aunque no es muy conocido por la comunidad. Pero nosotros los que sí
lo conocemos sabemos que es capaz de plasmar los más bellos
poemas y rimas de nuestra tierra. Muestra un raro vigor. Es un símbolo
para el colegio, tanto por su tiempo de trabajo como por su cariño y
amor que desborda...
(MIGUEL CABELLOS MOORE)
19. Entonces tenía sus cabellos
negros, salvo unas elegantes
canas en las sienes; ahora los ralos
mechones de su calva, son
amarillentos, sucios. Sus ojos eran
grandes, seguros de sí, dueños del
mundo (cuando no estaba el jefe);
pero esas dos ranuras que le
miraban fijamente son
pequeñitas, ratoniles, asustadizas.
Tenía dientes, y ahora no, le
deben haber sacado la dentadura
postiza, pues tiene los labios
hundidos y las mejillas fruncidas
casi hasta tocarse. Se ha sumido,
sus pies apenas rozan el suelo.
Para mirarlo ella tenía que alzar la
cabeza, estirar el cuello; ahora, si
se pusiera de pie, le llegaría al
hombro.
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