La administración de la CPU es parte del sistema operativo que planifica qué proceso ejecutará la CPU cuando hay múltiples procesos compitiendo por su uso. Los algoritmos de planificación como FIFO, SJF y Round Robin determinan qué proceso se ejecutará siguiente para optimizar el rendimiento del sistema y reducir los tiempos de espera de los procesos. Diferentes sistemas operativos como Windows y Linux usan diferentes enfoques de planificación.