La dirección es la parte central y más importante de la administración. Involucra tomar decisiones, comunicación, motivación y liderazgo para lograr los objetivos planeados de una organización. La dirección se define como guiar y supervisar a los subordinados para ejecutar las acciones necesarias a través de la delegación de autoridad. Es la función que hace que se lleven a cabo todos los elementos de la administración.