El aprendizaje situado es una estrategia educativa constructivista e integral que se basa en la construcción de significados a través de la interacción, la experiencia personal y el reconocimiento de la realidad del aprendiz. Integra cuatro fases no lineales que incluyen partir de la realidad del aprendiz, analizar y reflexionar sobre ella, resolver problemas en común y comunicar y transferir los conocimientos adquiridos.