El síndrome de Asperger afecta de 3 a 7 niños por cada 1.000 diagnosticado entre 7 y 16 años. Es un trastorno del desarrollo cerebral caracterizado por deficiencias en la interacción social y patrones de interés y conducta restrictivos. Fue descrito por primera vez por Hans Asperger en la década de 1940. Los niños con este síndrome suelen ser inteligentes y no tienen retraso en el habla, pero presentan problemas para relacionarse con otros y comportamientos inadecuados en ocasiones.