La investigación-acción surgió originalmente como una propuesta para abordar ciertas condiciones sociales, presiones políticas y aspiraciones profesionales. Se originó en la década de 1940 para desarrollar un enfoque de investigación que se aplicara a procesos comunitarios y ayudara a fundamentar proyectos educativos a gran escala. Actualmente, las principales escuelas de investigación-acción son la inglesa y la australiana, y se propone que sea una forma de indagación autoreflexiva emprendida por los participantes en contextos