2. ¿Qué es la canalización vía periférica?
La canalización venosa periférica es un método de obtener un
acceso vascular para administrar fármacos y perfundir
líquidos. Los fármacos administrados iv. por lo general se
deben diluir de manera adecuado.
3. objetivo
La canalización permite introducir medicamentos o soluciones al
cuerpo de la manera más rápida, comparada con otras vías de
administración de fármacos, ya que se tiene acceso directo a la
circulación venosa. De esa manera, el medicamento o solución se
dirigirá al corazón y después al resto del cuerpo.
4. LOS CATETERES
Un catéter es un tubo delgado normalmente hecho de un plástico
suave y flexible. Este dispositivo médico es utilizado para
transportar nutrientes, medicamentos, tomar muestras sanguíneas,
etc. Es importante saber elegir bien el número de catéter para cada
persona, ya que si elegimos mal podríamos causar daño en la vena.
7. Técnica:
Prepare el material previo a la punción venosa.
Coloque al paciente en decúbito supino con miembros superiores en posición
anatómica.
Lávese las manos siempre que la situación lo permita.
Utilice guantes del número adecuado.
Coloque el compresor venoso 5-15 cm por encima de la zona punción.
8. Elija la zona de punción mediante palpación, evitando zonas
lesionadas, cordones varicosos, etc.
Limpie la zona con solución antiséptica del centro al exterior.
Abra el angiocateter manteniéndolo sin tocar nada y tense la piel
con el dedo índice o pulgar de la mano contraria.
Introduzca el catéter con el bisel hacia arriba con un ángulo de 30
grados.
9. Observe si existe reflujo de sangre en el reservorio del angiocateter,
cuando esto ocurra, progrese el teflón de plástico, retire la aguja del
fiador y el compresor.
Presione externamente sobre el antebrazo, taponando la zona distal
del teflón para evitar la salida de sangre hacía el exterior.
Proceda a conectar el sistema de sueroterapia.
Proceda a fijar la vía.
10. Respecto a la elección y localización venosa
Dependerá de la patología y gravedad del paciente. Por este motivo,
aunque la recomendación general es seleccionar las vías más distales, en
situaciones de emergencia, se opta por aquella vía que sea posible.
11. Las vías periféricas más frecuentes son:
Dorso de la mano: digitales, metacarpianas, basílica y cefálica.
Antebrazo: radial y cubital.
Brazo: cefálica, basílica y mediana cubital.
Cuello: yugular externa.
Pierna: safena (en niños de 1 a 3 años. No recomendada en adultos por
formación de trombos y/o flebitis).