El documento describe dos acusaciones de mala conducta sexual contra un gerente por parte de una empleada. La primera acusación involucra un beso con otra empleada fuera de la oficina, y la segunda acusación tres semanas después alega que el gerente expuso su área genital y le pidió favores sexuales a la empleada cuando estaban solos. La investigación encontró testigos para el primer incidente pero no para el segundo. Aunque la denuncia se hizo tres semanas después del segundo incidente, se le dio credibilidad a la empleada