La cultura Chincha se extendió por los valles de Chincha, Pisco, Ica y Nazca en la costa sur del Perú entre los años 600-1470 d.C. Basaron su economía en la agricultura, la pesca y el comercio. Crearon cerámica sencilla de colores rojo, negro y blanco, así como textiles policromes y metalurgia de plata y cobre.