El documento clasifica las sustancias peligrosas en 9 clases, describiendo las características de las sustancias inflamables (Clase 4), comburentes y peróxidos orgánicos (Clase 5), tóxicas e infecciosas (Clase 6), radiactivas (Clase 7), corrosivas (Clase 8) y peligrosas varias (Clase 9). Para cada clase, se especifican los requisitos de almacenamiento correspondientes, como la separación de materiales y el uso de protecciones personales.