El documento contiene las declaraciones de la arrendadora respecto a la propiedad que arrienda. La arrendadora declara que la propiedad no tiene deudas ni cargas, y que entregará la posesión pacífica al arrendatario. También señala que la arrendadora se hará cargo de los impuestos a la propiedad. El documento establece además los términos para la recepción de los bienes arriendados y las mejoras que pueda realizar el arrendatario.