Los vehículos autónomos pueden percibir su entorno mediante sensores como láseres, radares y cámaras, e interpretar la información para identificar la ruta apropiada y obstáculos. Los primeros vehículos autónomos se desarrollaron en la década de 1980 y han mejorado su capacidad para conducir de forma autónoma en carreteras programadas a alta velocidad. Se espera que los vehículos autónomos estén disponibles para uso público a partir de 2025 y mejoren significativamente la seguridad v