Las compañías de financiamiento comercial (CFC) son intermediarios financieros que captan ahorros y ofrecen créditos a corto y mediano plazo para empresas y consumidores. Surgen en los años 1970 para regular el mercado extrabancario. Prestan servicios como tarjetas de crédito, líneas de crédito y leasing. Juegan un papel importante en el crédito a microempresas y ofrecen productos de ahorro y financiamiento para remesas familiares.