La creatividad se define como la capacidad de creación y conexión, relacionando ideas de diferentes direcciones para generar algo original. Implica el uso de la mente, las emociones y los talentos de una persona. Los procesos creativos no son lineales y se ven afectados por factores internos como la personalidad y la seguridad psicológica, así como por influencias externas del entorno. La creatividad constructiva requiere apertura a nuevas experiencias y la habilidad de jugar con ideas y conceptos.