Los hermanos Carlos y Noris desaparecieron misteriosamente de su hogar y se encontraron en una extraña juguetería donde los juguetes cobraban vida. Los niños ayudaron a reparar a los juguetes y en agradecimiento, estos les dieron la idea de cómo sus padres podrían vender mejor sus juguetes. Carlos y Noris despertaron y le contaron a sus padres su sueño, aliviando sus preocupaciones por haberlos encontrado.