El documento describe la formación docente como un sistema que incluye la formación inicial y el desarrollo profesional continuo. Señala que las reformas educativas en América Latina han puesto énfasis en mejorar la formación inicial de los maestros a través de leyes que establecen 4 años de estudios y residencias, así como el desarrollo profesional mediante capacitaciones continuas y la producción de materiales pedagógicos. Finalmente, enfatiza la importancia de que los maestros obtengan títulos avanzados y una preparación