Dionisio era el dios griego de la exuberancia de la naturaleza, especialmente de la vid y el vino. Nació de la unión de Zeus y Sémele, pero su madre murió consumida por el fuego celestial antes de dar a luz. Zeus rescata al niño y lo cría en sus muslos hasta que renace. Dionisio descubre el vino y viaja por el mundo acompañado de sátiros y bestias, instaurando las fiestas báquicas.