El documento destaca la importancia de proporcionar acceso público a la información relevante sobre seguridad industrial y normas aplicables a funcionarios, contratistas y visitantes de una organización. Señala que esperar que las personas conozcan los procedimientos y equipos de seguridad sin haber recibido la información es absurdo y puede poner en riesgo vidas. Argumenta que compartir información a través de cursos, prácticas y el acceso a expertos ayuda a adquirir una cultura de seguridad y reduce las fallas.