El documento describe el estilo artístico Barroco del siglo XVII, caracterizado por el uso de líneas curvas para crear sensación de movimiento, decoración recargada, y realismo para provocar emociones. Floreció en Italia, España, Francia y los Países Bajos, influyendo en la arquitectura, escultura y pintura de la época a través de artistas como Bernini, Caravaggio, Rubens y Rembrandt.