El movimiento artístico Madí fue fundado en 1946 en el Río de la Plata por artistas como Carmelo Arden Quin, Carlos María Rothfuss y Gyula Kosice. Se caracterizó por romper con las convenciones de la representación mimética a través de la abstracción geométrica y formatos no tradicionales, promoviendo la pluralidad de expresiones y presentando el arte como un objeto en sí mismo más que una representación.