El documento discute el valor y el potencial de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para promover la transparencia, la participación ciudadana y el desarrollo. Resalta que las TIC pueden usarse para dar voz a los marginados, visibilizar lo invisible, fortalecer redes y empoderar a los ciudadanos. Sin embargo, advierte que las TIC por sí solas no son suficientes y deben incorporarse en el contexto de cambios sociales y culturales más amplios.