2. . Por humanismo radical entiendo una filosofía global que insiste en la unidad de la raza humana; en la capacidad humana para desarrollar sus propios poderes y para llegar a la armonía interior y establecer un mundo pacífico. El humanismo radical considera como fin del ser humano la completa independencia, y esto implica penetrar a través de las ficciones e ilusiones hasta llegar a una plena conciencia de la realidad. Erich Fromm .
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4. El humanismo radical se habría ido fraguando en el pensamiento occidental a través de diferentes eventos a lo largo de 3500 años Primer momento (de 1500 a.C. a comienzos de la era cristiana): conversión humana de la idolatría a la religión humanista
5. Segundo momento (el mesianismo profético): De la desobediencia a la redención Es la historia de la evolución del ser humano hacia su humanidad, del desarrollo de sus cualidades específicamente humanas En la capacidad de decir no y de tomar conciencia de sí, se da el primer paso hacia la libertad e inicia la historia humana. Surgen también las ideas de una humanidad única, hecha a semejanza de Dios y del amor al prójimo Tercer momento: El pensamiento grecorromano y el derecho natural
6. Cuarto momento: (los orígenes del cristianismo): De la redención histórica a la redención transhistórica de la humanidad Quinto momento (la iglesia católica 325-1450): Fusión del mesianismo profético con el pensamiento greco romano principio de humanismo universalista en Cristo Sexto momento: del Renacimiento al siglo X1X. El humanismo secular y el pensamiento utópico Descubrimiento del naturalismo y el individuo, surgimiento de la ciencia moderna.
7. Séptimo momento (la contrailustación siglo XVIII): Naturaleza versus Civilización Octavo momento (el pensamiento socialista siglo XIX): La era de la plenitud había de traer al ser humano el dominio de la naturaleza, la eliminación de las guerras y la creación del bienestar material para el desarrollo humano individual y colectivo Epílogo posthumanista El siglo XX y la era de la desesperanza, el miedo a la libertad y la idolatría del consumo y la técnica.
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9. “ Distintas versiones del error de Descartes oscurecen las raíces de la mente humana en un organismo biológicamente complejo pero frágil, finito y único; oscurecen la tragedia implícita en el conocimiento de las citadas fragilidad, finitud y singularidad. Y allí donde los seres humanos no consiguen ver la tragedia inherente de la existencia consciente, se sienten mucho menos llamados a hacer algo para minimizarla y pueden tener menos respeto por el valor de la vida” El error de Descartes Antonio Damasio
10. 1. Sobre la especificidad óntica de la condición humana El punto medular de la especificidad de la naturaleza humana Fromm la identifica en la condición original de volubilidad biológica y la conciencia concomitante de su impotencia y fragilidad. Cuanto menos acabado y estable es el equipo instintivo animal, tanto más desarrollada está su capacidad cerebral y aloplástica La existencia humana a diferencia del resto de los organismo, se encuentra en un estado de constante desequilibrio, es el único animal para quien su propia existencia constituye un problema que debe resolver y del cual no puede evadirse
11. “ Dotado de conciencia de sí y de razón, el hombre sabe que es un ser aparte de la naturaleza y de los demás; comprende su impotencia y su ignorancia, y tiene conciencia de que su fin será la muerte” (Fromm, E.) Teniendo conciencia de sí comprende sus limitaciones y aciago destino, así como sus anhelos sin fin; su existencia se erige en un problema al que ha de buscar solución y que no puede obviar.
12. 2. Tesis de las dicotomias existenciales Esta problemática, surgida de la oposición entre sus limitaciones instintivas y su capacidad racional, es lo que define la índole esencial de la naturaleza humana y conduce a dicotomías existenciales de las cuales el ser humano, si bien no puede evadirse, sí reacciona a ellas según su carácter y cultura La más fundamental de las dicotomías existenciales es la de vida-muerte Derivada de la anterior surge la dicotomía entre la existencia individual y la colectiva: La vida del ser humano, comenzando y concluyendo en un punto accidental del proceso evolutivo de la especie, entra en conflicto trágico con la exigencia del individuo de lograr la plena realización de sus potencialidades
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14. b. Mediante el desarrollo de nuevas formas de arraigo o vínculo con el mundo y los demás c. Mediante el desarrollo de un sentido de unidad consigo mismo que compense su escisión existencial d. Mediante el desarrollo de un sentido de autoeficacia y valía que compense sus sentimientos de volubilidad e impotencia
15. Esas necesidades existenciales, en conjunto con las sociobiológicas animales, conforman un conjunto de problemas expresivos y práctico vitales que a la manera de una naturaleza humana se encuentran a la base de toda experiencia etnosociopsicogenética Pero los modos característicos por los que las personas satisfacen sus necesidades práctico vitales y expresivas se encuentran, al menos funcional y genéticamente, correlacionados con las particularidades de los entornos socioeconómicos y culturales en que se desenvuelven
16. No obstante esos modos característicos de resolución o satisfacción de necesidades son reductibles a unos cuantos arquetipos fundamentales signados por el grado de productividad/improductividad con que se consigue dicha satisfacción, siendo su permutación especifica, y en particular el grado de productividad o improductividad de resolución de las necesidades, los que se encuentran en función de las contingencias socioculturales. Toda formación social a la vez que selecciona y fomenta determinadas posiblidades de afrontamiento y resolución, coarta y reprime otras posibilidades e inclinaciones contrarias a los modelos sociales vigentes
17. Esa bipolaridad productividad/improductividad especifica entonces el contenido y dirección ético-políticos de los modos característicos de resolución de necesidades en entornos socioculturales específicos A la vez, esos entornos socioculturales específicos son enjuiciables por el grado en que favorecen una u otra modalidad de resolución El carácter humano, individual o colectivo, se instituye en la forma relativamente permanente en que es estructurada la energía psíquica en el proceso de relación con el mundo natural y social, a fin de satisfacer esa necesidades existenciales y de sobrevivencia
19. El concepto de una Ciencia del ser humano descansa sobre la premisa de que su objeto, el ser humano, existe y de que hay una naturaleza humana que caracteriza a la especie humana. El presupuesto central es que para el necesario conocimiento del ser humano hay que conocer su «naturaleza» específica y este es el objetivo de la ciencia del ser humano. Pero si este es el objetivo de la ciencia del ser humano, lograr una definición satisfactoria del ser humano es su fin, no su premisa.
20. La especie homo puede definirse no sólo anatómica y fisiológicamente: los individuos a ella pertenecientes tienen en común unas cualidades psíquicas básicas, unas leyes que gobiernan su funcionamiento mental y emocional, y las aspiraciones o designios de encontrar una solución satisfactoria al problema de la existencia humana. No obstante, nuestro conocimiento del ser humano es aún tan incompleto que no podemos dar de él una definición satisfactoria en sentido psicológico.
21. Es incumbencia de la ciencia del ser humano llegar a una definición correcta de lo que merece llamarse naturaleza humana El problema consiste en inferir el núcleo común a toda la especie humana de las innumerables manifestaciones de la naturaleza humana, tanto normales como patológicas, según podemos observarlas en los diferentes individuos y culturas.
22. La tarea consiste, además, en reconocer las leyes inherentes a la naturaleza humana y las metas adecuadas para su desarrollo y despliegue. Para tal tarea se requiere la constitución de una ciencia transdisciplinaria, a partir de lo que aportan distintas ciencias como la Antropología, Psicología, Sociología, Historia, Paleontología, Neurociencias, Genética, pero también Arte, Mitología y Teología. Esta ciencia transdisciplinaria del ser humano estaría sujeta a contrastación empírica, pero solo de una manera mediata a través de su contrastación con las teorías de las ciencias particulares
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25. El objetivo final de esta ciencia humana, es llegar a esclarecer las condiciones específicas de la existencia humana , definitorias, universalmente, de la «situación humana». Pero si no se puede hablar de una « naturaleza humana » común a todos los seres humanos o, si se prefiere, de una « condición humana » universal, no tiene sentido una ciencia del ser humano, como teoría filosófico-antropológica, lo que conllevaría la imposibilidad de una ética y de todo proyecto de emancipación universales.
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28. Este énfasis en la aleatoriedad sociocultural de prácticas y creencias lleva a poner en entredicho todo principio de universalidad, progreso o racionalidad, presupuestos básicos en la concepción frommiana del humanismo radical.
32. SOBRE LA HISTORIA DEL HUMANISMO: Si bien el humanismo moderno, su fines y dispositivos se reconfiguran con el Renacimiento, no nacen con este, sino, en el pensamiento occidental, se van configurando con las tradiciones grecolatinas y judeocristianas. POSDATA: También fuera del pensamiento occidental se habría ido configurando en las tradiciones del taoismo, el budismo y el confusionismo INTERROGANTE: ¿Se podria hablar de una tradición humanista en el pensamiento precolombino ? Al menos sí se habla de una tradición ecologista
33. Meditaremos la idea del hombre blanco de comprar nuestras tierras. Pero, ¿Se puede comprar el aire o el calor de la tierra, o la agilidad del venado? ¿Cómo podemos nosotros venderos esas cosas, y vosotros cómo podríais comprarlas? ¿Podéis acaso hacer con la tierra lo que os plazca, simplemente porque un piel roja firme un pedazo de papel y se lo entregue a un hombre blanco? Si nosotros no poseemos la frescura del aire, ni el reflejo del agua, ¿cómo podréis comprarlos? Somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros. Las flores perfumadas, el venado, el caballo, el gran águila, son nuestros hermanos.. Las cumbres rocosas, los prados húmedos, el calor del cuerpo de los potros y de los hombres, todos somos de la misma familia.
34. … La tierra no pertenece al hombre, sino el hombre a la tierra. Todo está relacionado como la sangre que une a una familia. El hombre no creó el tejido de la vida, sino que simplemente es una fibra de él. Lo que hagáis a ese tejido, os lo hacéis a vosotros mismos. … Somos raza distintas. Nuestros niños no juegan juntos y nuestros ancianos cuentas historias diferentes. Dios os es favorable y nosotros, en cambio, somos huérfanos. … No es mucho realmente lo que nos une. El día y la noche no pueden convivir y nosotros meditaremos vuestra oferta de comprar nuestro país y enviarnos a una reserva. Allí viviremos aparte y en paz. No tiene importancia dónde pasemos el resto de nuestros días. Nuestros hijos vieron a sus padres denigrados y vencidos
35. … Pero cuando el último piel roja haya desaparecido de esta tierra y sus recuerdos sólo sean como la sombra de una nube sobre la pradera, todavía estará vivo el espíritu de mis antepasados en estas riberas y en estos bosques. Porque ellos amaban esta tierra como el recién nacido ama el latir del corazón de su madre. …… Pero ¿por qué he de lamentarme por el ocaso de mi pueblo? Los pueblos están formados por hombres, no por otra cosa. Y los hombres nacen y mueren como las olas del mar. Incluso el hombre blanco, cuyo dios camina y habla con él de amigo a amigo, no puede eludir ese destino común. … También los blancos desapareceréis, quizás antes que las demás razas. Continuad ensuciando vuestro lecho y una noche moriréis asfixiados por vuestros propios excrementos.
36. SOBRE LA CRITICA POSMODERNA DEL HUMANISMO Pero tras la fluidez y vorágine del relativismo posmodernista sobre la condición humana no parece quedar más materialidad que la de una pluralidad de irreconciliables (Lyotard) e inconmensurables (Feyerabend) juegos de lenguaje (Wittgesntein) en que participan cínicas y particularistas voluntades de poder (Foucault) que despojan de todo sentido a la existencia humana, reducida a mero dispositivo de transmisión o soporte (interfase) de las vicisitudes y tensiones de aquellos juegos.
37. Frente al relativismo y amoralismo de estas tendencias, el Humanismo Radical destaca el valor de las potencialidades humanas capaces de soportar y capear la vorágine social de nuestros días, en particular desde nuestros contextos periférico dependientes (Sonntag y Valecillos) y poscoloniales (De Toro) en los que, sin haber terminado de entrar a la modernidad, se nos lanza a salir de ella, en un palimpsesto en que se superponen y debaten la persistencia de tradiciones milenarias y coloniales, los procesos de la modernización socioeconómica, política y tecnológica, y las andanadas del posmodernismo cultural (García-Canclini).
38. Frente a los desafíos del Transhumanismo cabe formularse la interrogantes a propósito de si será posible una subversión de la condición humana, con base en l os avances de la técnica, la biologia y la medicina, a tal punto que trascienda los límites de su paradoja existencial ¿Es acaso el sincretismo biológico-informático la respuesta a esta paradoja existencial? Superados los límites de la oposición reflexiva entre la volubilidad y finitud biológica humanas y sus potencialidades sin límite, ¿que será de la ex-sistencia humana, punto de partida de sus más caros temores y anhelos?