2. SITUACIÓN DE LA IGUALDAD DE GÉNERO EN
LA ACTUALIDAD
QUÉ ES LA COEDUCACIÓN
EL LENGUAJE
LOS MODELOS EDUCATIVOS
PLAN DE COEDUCACIÓN EN LA ESCUELA.
PRÁCTICA COEDUCATIVA.
3. Hoy en día, el cuidado del hogar sigue siendo una tarea que recae mucho
más en las mujeres, ocasionando un desequilibrio que es imprescindible
abordar si queremos fomentar la Igualdad de Oportunidades. Educar en
Igualdad, fomentando la corresponsabilidad, puede ser una fuente de
autonomía para hombres y para mujeres.
En 2013, el Boletín Estadístico del Instituto de la Mujer, publicaba las
siguientes cifras:
El 91,9 % de las mujeres emplea tiempo en el cuidado del hogar y la familia, con
una media de 4’29 horas de dedicación. Entre los hombres lo hacen el 74,7 % y
dedican casi la mitad: 2’32 minutos
El cuidado de menores lo asumen en solitario el 33 % de las mujeres frente al
2,19 % de los varones. En el caso de personas dependientes, son cuidadas en
solitario por el 49,3 % de mujeres y el 16,6 % de hombres. Respecto a las tareas
del hogar, un 44,5 % de las mujeres las realiza en solitario frente al 9,6 % de los
varones.
En la actualidad, se dan circunstancias que afectan en el presente
y originan desigualdad entre hombres y mujeres. Hay barreras que
superar.
4. La Doble jornada. Esta expresión surge con la incorporación masiva de las mujeres
al mercado laboral, para designar aquellas situaciones en que además del tiempo
dedicado al trabajo asalariado, continúan siendo ellas, mayoritariamente, quienes
hacen las tareas del hogar y cuidan de la familia. Las últimas cifras del Instituto
Nacional de Estadística, (INE, 2016) nos indican cifras muy interesantes sobre el
desequilibrio existente entre quienes realizan las tareas del hogar y el cuidado de la
familia.
El Techo de cristal, el Glosario de la Organización Internacional del Trabajo, (OIT)
lo describe como "situaciones en las que el ascenso de una persona calificada
dentro de la jerarquía de una organización se detiene en un nivel determinado a
causa de alguna forma de discriminación, casi siempre por sexismo o racismo".
La Brecha salarial entre hombres y mujeres es "la diferencia existente entre
los salarios percibidos por los trabajadores de ambos sexos, calculada sobre la base
de la diferencia media entre los ingresos brutos por hora de todos los trabajadores",
como lo señala y describe de manera sencilla y extendida esta publicación de
la Comisión Europea.
6. Este concepto de corresponsabilidad
hace referencia a que las tareas del
cuidado de la vida y de las
personas deberían ser asumidas por
quienes conviven en un hogar
Corresponsabilidad. Es la
responsabilidad compartida. Es mucho
más que un reparto de tareas; supone
que hombres y mujeres acepten
el compromiso de conocer las
necesidades cotidianas de las personas
con quienes se comparte la vida y
ponerse en disposición de ayudar a
solventarlas.
En un sentido más amplio, hoy se habla
de corresponsabilidad social que
comprende también otros agentes
sociales: Estado, empresas, sindicatos,
instituciones, organizaciones no
gubernamentales…”
7. Desde hace ya muchos años, tanto desde la
escuela y algunas Asociaciones de Madres y
Padres como desde la Administración y los
Organismos de Igualdad, se proponen
materiales y recursos prácticos que señalan
la importancia de la corresponsabilidad.
8. Finales de los
años 70 y en la
primera mitad
de los 80
•Circularon los escritos, principalmente de mujeres anglosajonas, que hicieron
presente la coeducación en las aulas. Mediante la elaboración de nuevos
materiales didácticos, se pasó a cuestionar los estereotipos masculinos y
femeninos, poniendo en evidencia que educar en igualdad no se limita a la
mera existencia de la escuela mixta.
Finales de
los 80
•Empiezan a publicarse guías de coeducación y a implicarse poco a poco en
esta tarea más personas e instituciones, poniéndose de relieve el hecho de
que educaren igualdad requiere la participación de todos los contextos
educativos: familias, medios de comunicación…
ÚLTIMOS
AÑOS…
•Internet y de las redes sociales se ha revelado como un eficaz medio para
compartir reflexiones, prácticas, recursos que promueven una educación para
la igualdad, facilitando un intercambio en el que participan numerosas
personas, que después de investigar, experimentar, crear, hacer estudios y
propuestas coeducativas, lo publican en la Red.
9. La práctica coeducativa, esencial para educar en igualdad, propone sacar
a la luz una genealogía femenina, tradicionalmente oculta, tanto en lo que
se refiere a la transmisión de saberes imprescindibles para el cuidado de la
vida, como en las importantes aportaciones a todos los ámbitos del saber;
una propuesta cuyo objetivo es enriquecer el conocimiento de la historia
de la humanidad y así poder transmitirlo a quienes educamos.
La tarea de coeducar no se reduce al ámbito de la enseñanza formal, pues
pretende llegar a la transformación de las concepciones que mantienen
una clara situación discriminatoria.
En el proceso de socialización de un ser humano, y por tanto en su proceso
educativo, intervienen también la familia y los medios de comunicación,
que a través de sus mensajes transmiten información, valores y
conocimiento; es decir, que la tarea es una responsabilidad compartida.
Cada persona en su ámbito, es partícipe de esta responsabilidad y por
tanto puede contribuir a transformar aquellas situaciones que son causa de
desigualdad.
10. El lenguaje es un instrumento de comunicación y de
representación simbólica de la realidad, una realidad que desde
la coeducación se propone sea nombrada plenamente. El
lenguaje que usamos refleja valores y puede condicionar,
reforzar o limitar la imaginación y las relaciones.
• Es importante tener en cuenta que como afirma Eulalia Lledò:
“El lenguaje no es sexista en sí mismo, sí lo es su utilización. Si
se utiliza correctamente también puede contribuir a la igualdad
y a la visibilización de la mujer”.
Al hablar de un uso no sexista del lenguaje, debemos
asegurarnos de:
Usar un lenguaje que represente a ambos sexos.
Prestar atención a las expresiones o palabras que puedan
ser discriminatorias.
Plantear la importancia de que nombrar es también, sacar a la
luz la presencia femenina, sus logros y experiencias.
11. Hace ya algunas décadas Simone de Beauvoir (1949) escribió aquello de que “la
mujer no nace, se hace”
Aprender a ser hombres, aprender a ser mujeres: los seres humanos somos como
somos (y quienes somos) como consecuencia del influjo de una serie de mediaciones
subjetivas y culturales (el origen sexual, el lenguaje, la familia, la instrucción
escolar, el grupo de iguales, el estatus económico y social, las ideologías, los estilos
de vida, las creencias, los mensajes de la cultura de masas…) que influyen de una
manera determinante en la construcción de nuestras identidades. Hombres y
mujeres somos diferentes no sólo porque tengamos un sexo inicial distinto sino
también porque nuestra socialización es distinta.
No hay una esencia femenina ni una esencia masculina, una manera única de ser
mujer y de ser hombre, sino mil y una maneras diversas y plurales de ser mujeres y
hombres.
Uno de los aspectos en los que se refleja no sólo la diferencia sexual entre
mujeres y hombres sino la desigualdad cultural entre unas y otras es el lenguaje.
Somos lo que decimos y hacemos al decir. Y somos lo que nos dicen y nos hacen al
decirnos cosas De forma invisible moldea nuestra forma de pensar sobre las demás
personas, sus acciones y el mundo en general”.
12. “La valoración de la imagen corporal que
hacen los medios de comunicación y en
especial la Televisión, a través de sus
múltiples formatos (información, ficción,
publicidad, entretenimiento, debates,...)
tiene trascendencia e influencia en la
percepción y valoración social de la imagen
corporal de los telespectadores”.
Desde hace años, esta trascendencia e
influencia forman parte fundamental de la
práctica coeducativa y también de algunos
Organismos de Igualdad, que tienen, entre
otros fines, enseñar a mirar críticamente
los mensajes que nos llegan continuamente
a través de los medios.
Otro aspecto a considerar, es
el tratamiento diferenciado que dan
algunos medios de comunicación a
determinadas noticias, según se trate de
mujeres o de hombres. Un ejemplo claro
es el deporte femenino, que a pesar de sus
cada vez más e importantes logros, sigue
siendo invisible para determinados
medios. De ahí que sea necesario hacer una
lectura crítica y reconocer y valorar a
mujeres deportistas, que han destacado y
destacan en diferentes disciplinas
deportivas.
La publicidad es otro de los medios en los
que es patente la visibilización de la
desigualdad.
13. Como una solución para eliminar las barreras de la desigualdad, encontramos
conciliación y corresponsabilidad. Los enfoque que se dan son diversos:
Conciliación. "El concepto conciliación trabajo-familia se ha entendido de diversas
maneras. Conciliación en sentido estricto, se refiere a la compatibilidad de los
tiempos dedicados a la familia y al trabajo. En un sentido amplio, se refiere
al desarrollo pleno de las personas en el ámbito del trabajo, afectivo, familiar,
personal de ocio, estudio e investigación, y a disponer de tiempo para sí. Por ello,
conciliar significa mantener el equilibrio en las diferentes dimensiones de la vida
con el fin de mejorar el bienestar, la salud y la capacidad de trabajo personal".
Un hito importante: la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de mayo, para la igualdad
efectiva de mujeres y hombres, eleva a la categoría de derechos los diferentes
instrumentos de conciliación de la vida personal, familiar y laboral de trabajadores
y trabajadoras referidos a:
Permiso de maternidad
Permiso de paternidad
Lactancia
Reducción de jornada
Excedencia por cuidados a menores y familiares
Vacaciones
Flexibilidad de jornada.
14. DEBEMOS EMPEZAR en la escuela por:
Reflexionar sobre la importancia de la coeducación para prevenir la
violencia.
Identificar cómo la violencia se cuela en nuestras vidas y relaciones.
Indagar sobre diferentes modelos de relación.
Conocer propuestas y recursos elaborados por quienes ven la práctica
coeducativa fundamental para prevenir la violencia.
La Discriminación como eje de trabajo:
¿Dónde empiezan los derechos humanos universales? Pues en pequeños
lugares, cerca de nosotros; en lugares tan próximos y tan pequeños que
no aparecen en los mapas. Esos son los lugares en los que cada hombre,
mujer y niño busca ser igual ante la ley, en las oportunidades, en la
dignidad sin discriminación. Si esos derechos no significan nada en esos
lugares, tampoco significan nada en ninguna otra parte”. Eleanor Roosvelt
La discriminación, es decir, el trato diferente y perjudicial que se da a
una persona por motivos de raza, sexo, ideas políticas,
religión… entraña violencia y se presenta de múltiples maneras:
cuando se excluye, se ignora, se menosprecia, se invisibiliza… y cada
una de estas actitudes se expresa, con mayor o menor intensidad.
15. La realidad nos enseña que existen diversas
maneras respetuosas y libres de relacionarnos en
pareja.
Las falsas creencias, los prejuicios y
estereotipos se cuelan en la concepción de sí y
de las relaciones, siendo causantes de la violencia
en algunas parejas adolescentes, una situación
que preocupa a una buena parte de la sociedad.
Estas creencias, prejuicios y estereotipos, que
nos pueden llegar desde temprana edad, pueden
ser reforzados o no en la adolescencia. De ahí la
importancia de Educar en Igualdad desde la
infancia.
Pero no basta aprender a mirar críticamente: es
también responsabilidad de quienes queremos
Educar en Igualdad brindar alternativas, pues
existen y la práctica coeducativa ofrece recursos
para hacerlo. Estos recursos están cada vez más a
nuestro alcance a través de Internet y las redes
sociales: estudios, manuales, guías…, tanto para
quienes educamos, como dirigidas a la gente
joven.
16. Desde hace varias décadas, se diseñan y publican Planes
para educar en Igualdad de oportunidades en el ámbito
estatal, autonómico, provincial y local así como en
diferentes sectores privados y públicos, en el ámbito
educativo, sanitario, administrativo, etc.
El objetivo en general es hacer efectiva la igualdad de
trato y de oportunidades entre mujeres y hombres, en
particular mediante la eliminación de la discriminación
de la mujer en cualquiera de los ámbitos de la vida para
así alcanzar una sociedad más democrática, más justa y
más solidaria. Todos tienen como objetivo, hacer reales
las oportunidades de desarrollo personal, profesional,
laboral, a través de aplicar una serie de medidas que
garanticen la igualdad de trato y de oportunidades entre
mujeres y hombres y a eliminar la discriminación por
razón de sexo.
17. Cada día están más presentes las medidas
para prevenir la violencia hacia las
mujeres, contemplando los ámbitos del
lenguaje, los mensajes de los medios de
comunicación y la publicidad, la
orientación para el futuro, la conciliación
de la vida personal, familiar y laboral y la
corresponsabilidad, reconociendo de esta
manera que pueden transmitir, en
ocasiones, desigualdades que originan
violencia. Hay un empeño importante
en sensibilizar a la población en general
en el convencimiento de que la
desigualdad, la discriminación y por tanto
la violencia, nos concierne a todos y a
todas.
18. La educación debería contribuir a evitar cualquier forma de discriminación
por razón de sexo, grupo social, origen étnico, raza o creencia. En este
contexto, urge una educación lingüística que fomente los conocimientos, las
habilidades y las actitudes que hacen posible el aprendizaje de una ética
lingüística que evite el influjo de los prejuicios culturales, los estereotipos
sociales y sexuales y las inercias expresivas en las maneras de hablar y de
escribir de las personas. Así se contribuirá a una mayor conciencia en torno a
las desigualdades sociales que se construyen a partir de la diferencia cultural
y sexual y a alimentar la esperanza de que otro mundo es posible y deseable.
Un Plan de Igualdad de un centro debería detallar al menos estos aspectos
básicos de la coeducación:
Visibilidad de las diferencias entre alumnas y alumnos, como de las
mujeres.
Transversalidad. Una cuestión de todos los que vivimos en el centro.
Reforzar en todas las áreas
Inclusión. Tiene en cuenta a toda la comunidad educativa.
En el centro hay un responsable que vele por la igualdad en cada aspecto
del día a día.
19. Los centros educativos deberían tener como
objetivos la igualdad entre alumnos y alumnas
construyendo las bases en igualdad, aceptar las
diferencias, favorecer las relaciones
interpersonales y prevenir la violencia de género.
Y como contenidos deberían contar al menos con:
El cuidado de las relaciones de género en el aula
Cuidado del lenguaje
Distribución de espacios y tareas
Educación sentimental y sexual
Fomentar la ética del cuidado
20. Los centros educativos deben concretar en sus
documentos institucionales cómo se atiende la
igualdad.
Al menos debe tenerse en cuenta en:
El Proyecto Educativo de centro, dentro de las líneas
prioritarias de actuación y seña de identidad.
Plan General Anual, concretando un diseño de objetivos e
intervenciones en el curso.
Proyecto Curricular de Etapa, en donde se incluyan
orientaciones de cómo se aborda la coeducación e igualdad en
las áreas, trabajando el eje transversal de la educación para la
igualdad de oportunidades.
Programación didáctica de aula, la cual se debe enriquecer con
la coeducación en cada propuesta de trabajo.
Todos los documentos y comunicaciones deben cuidar el
lenguaje y proteger el tratamiento de la información de
elementos sexistas.
21. CONVIVENCIA EN LOS CENTROS EDUCATIVOS. Módulo 3. Departamento de Educación, Cultura y Deporte. Aragón.
http://institutoasturianodelamujer.com/iam/wp-content/uploads/2010/03/Diccionario_coeducativo.pdf
http://www.educandoenigualdad.com/portfolio/diccionario-online-de-coeducacion/
http://intercambia.educalab.es/wp-content/uploads/oldIntercambia/archivos_secciones/147/15misteriochocolate.pdf
http://www.inmujer.gob.es/areasTematicas/educacion/programas/docs/130PpropCoeducacion.pdf