Este documento resume cómo se producen los incendios forestales, ya sea de forma natural por fenómenos meteorológicos como los rayos o de forma provocada por el hombre, cómo se pueden combatir mediante la detección temprana y la excavación de zanjas, y cuánto tiempo tardan las zonas quemadas en regenerarse, lo que depende del ritmo de crecimiento de las especies vegetales. También describe las consecuencias de los incendios forestales frecuentes como la interrupción de los ciclos naturales, la desaparición de especies

1. INCENDIOS
FORESTALES

2. ¿Como se producen?
• Los incendios forestales se producen por la
acción del fuego que quema la vegetación de
una determinada zona boscosa. Pueden ser
naturales o provocados.

3. • Son originados por fenómenos
meteorológicos, como los rayos, la ausencia
de lluvias y el calor. Los segundos se deben a
descuidos o a la actividad intencional del
hombre.

4. ¿Como se pueden combatir?
• Uno de los principales factores de éxito en su control es el
sistema de alarma, que permite una localización temprana y
se evita así que se extienda el incendio. Dependiendo del tipo
de fuego, se determina la estrategia, si el incendio es de
superficie, se excavan zanjas para circunscribirlo y, al no poder
extenderse, se apaga solo.

5. ¿Cuando se tarda en regenerar las
zonas quemadas?
Varios años después de un incendio forestal, las
especies vegetales y la fauna adquieren las
características de un bosque joven. La cantidad de
años para la regeneración del bosque depende del
ritmo de crecimiento de las especies vegetales que
lo conforman.

6. Consecuencias
• Cuando la frecuencia de los incendios
forestales en una región concreta es alta, el
impacto puede ser devastador. Se
interrumpen los ciclos naturales de los
bosques y desaparecen las especies nativas,
mientras que proliferan las plantas invasoras.

7. • Los incendios forestales aumentan los niveles
de dióxido de carbono en la atmósfera,
contribuyendo al efecto invernadero y al
cambio climático. Además, generan cenizas y
destruyen nutrientes. Por último, erosionan el
suelo, propiciando inundaciones y
corrimientos de tierra.
Mayra Quezada
Décimo “B”