El documento habla sobre la necesidad de innovar para adaptarse a una sociedad con más personas de la tercera edad. Propone que la innovación no solo implica nuevos productos tecnológicos, sino también asumir riesgos personales, reconstruir vínculos sociales, seguir aprendiendo de forma diferente y compartir experiencias a través de las redes sociales. Finalmente, argumenta que las personas mayores deben dar un salto para aprovechar las oportunidades que les brinda la tecnología y participar activamente en la innovación social.