La Unión Europea ha adoptado nuevas normas de privacidad para proteger mejor los datos personales de los ciudadanos europeos. Estas normas, conocidas como Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), entraron en vigor en mayo de 2018 y establecen estrictos requisitos para el almacenamiento y uso de datos personales. Las empresas que no cumplan con estas normas se enfrentan a multas de hasta el 4% de sus ingresos globales anuales o 20 millones de euros.