Este documento discute cómo los procesos educativos se han visto afectados por factores sociales, políticos, económicos y tecnológicos en el siglo XXI. Explica que la revolución tecnológica ha transformado no solo la técnica sino también la sociedad, la política y la cultura. Finalmente, propone algunas estrategias para aprovechar mejor las nuevas tecnologías en la educación, como obtener financiamiento, capacitar docentes, mejorar la comunicación y desarrollar currículos y recursos basados en la