Presentación realizada por David Santiago Acosta Tombé, de grado 11-2 en el colegio Rafael Navia Varón, para la profesora Irela García en la especialidad de sistemas.
2. Las redes sociales, una práctica herramienta de
entretenimiento y contacto entre amigos y seres queridos,
son un fenómeno en evidente expansión en el mundo.
La conducta humana en sociedad tiene muchas
características y formas. En la actualidad, con el avance de
las tecnologías de la información y la comunicación (tic), el
comportamiento de los seres humanos ha explorado
nuevos horizontes y nuevos caminos; uno de ellos es el
mundo virtual y, en especial, el de las redes sociales .
“Internet no es una tecnología que nos haya sido impuesta
y ante la cual solo podamos reaccionar de dos maneras:
aceptarla tal cual es o evitarla por completo. De hecho,
tenemos más poder para influir en este entorno que el que
nunca hemos llegado a tener para influir en la televisión o
LA ÉTICA EN LAS REDES
SOCIALES
3. Estas palabras marcan un sendero de orientación
de lo que es internet y de lo que se puede hacer en
ella. Se puede pensar en internet como un mundo
dentro del mundo. En la red se puede llevar a cabo
todas las acciones realizables en el mundo real. Lo
anterior ha venido ligado a un creciente fenómeno
de comportamientos inadecuados tales como
spam , scam , suplantación de identidad y muchos
otros, contemplados dentro de la legislación en
muchos países y cometidos por usuarios que se
aprovechan de la vulnerabilidad de dichas redes.
Pero, más allá de cuestionar los fraudes
electrónicos o los delitos informáticos, es necesario
4. Un individuo puede tener comportamientos
diferentes en el «mundo real» y en el «mundo
virtual», lo que motiva este escrito para generar una
pequeña orientación en el uso responsable de las tic
y, en especial, de la información y la intimidad en las
redes sociales. Dichas herramientas ya no solo son
útiles para encontrar personas, es posible, además,
compartir fotos, música, jugar y otra cantidad de
actividades programadas por terceros, gracias a
plataformas de desarrollo de aplicaciones para
Facebook, Sonico, hi5, Twitter y muchas más. Su
crecimiento se ha dado de manera exponencial y las
personas, sin advertir las posibles consecuencias, al
sus- cribirse, proporcionan información personal
delicada que puede ser utilizada por delincuentes
informáticos. Una subjetiva, que va ligada a la
cultura, es el descuido sobre la propia información, y
otra objetiva, unida al factor técnico de seguridad
5. Las redes sociales, debido a un incipiente control sobre sus
usuarios y programadores, son hoy la nueva plataforma de
acción para aquellos que pretenden vulnerar los derechos
fundamentales.
La explotación de la vulnerabilidad dentro de un sistema
informático trae riesgos de toda índole, los cuales deben
ser minimizados hasta llegar a un riesgo residual fácilmente
detectable y controlable gracias a un adecuado plan de
contingencia. Al contener delicada información personal de
sus usuarios, las redes sociales representan un escenario
perfecto para los delincuentes informáticos gracias a las
muchas vulnerabilidades, debidas de forma principal a la
ignorancia de quienes las utilizan. En la gran mayoría de los
casos, los usuarios, sin medir consecuencias, ofrecen en sus
perfiles datos tan importantes como su historia laboral,
cargo actual, teléfonos, correos electrónicos y hasta
6. Una de las razones del éxito de las redes sociales
online es que hacen posible el ejercicio de la
libertad de los seres humanos a niveles nunca
antes vividos, salvo en los primeros tiempos de las
comunidades originarias.
Hoy en día, gracias a Internet, la última de las
herramientas de comunicación que ha hecho
posible la masificación de las ideas y su difusión a
escala global, más de un tercio de la poblacion
mundial está conectada y logra a diario expresarse
incluso fuera de su ámbito natural. Y lo que es
más importante: seres desconocidos y
geográficamente distantes suelen entrar en
contacto con otros a lo largo y ancho del planeta, y
7. Cuando eso ocurre, los policías de la red suelen
sugerir y adoptar entonces medidas tendientes a la
aprobación de instructivos, reglamentos o leyes
referidas, por ejemplo, a la privacidad, a la
preservación de los datos personales, a la
responsabilidad por el uso de contenidos, a la
protección de los contenidos creativos, difamación,
acoso o cyberbullying, a la protección de la propia
imagen, ect. No dudamos de la eficacia de un
control basado en la Ley, pero apostamos en
primer término por un sistema de autocontrol
basado en la ética. Un sistema así consagrado tiene
su soporte en la moral, no tiene fuerza coactiva
ninguna porque pertenece siempre al reino de la
libertad. Es apostar al individuo oficiante de las
redes sociales online, y al cuidado de sí mismo y
8. Erradicando el miedo, los temores ante el otro, la
zancadilla, el descrédito, lo cual suele verse en los tl, muros,
o boards de las redes sociales online donde se prioriza por
la descalificación personal del otro en vez de optar por el
disenso basado en la confrontación de las ideas. Eso
implica ponerse en el lugar del otro, e intentar desde esa
perspectiva ofrecer todas las respuestas a nuestra propia
inconformidad con el entorno. No propiciamos un entorno
digital desprovisto de normas legales. Sin embargo,
aspiramos sí, por encima de todas las cosas, un entorno de
redes en el que los mecanismos de autorregulación sean
cada vez más habituales y efectivos.
9.
10.
11. LA RESPONSABILIDAD EN LAS
REDES SOCIALES
Los usuarios de las redes sociales, al igual que
quienes comunican a través de los medios
impresos y electrónicos, tienen una gran
responsabilidad.
12. Las redes sociales, además de fungir como medios
de catarsis por situaciones que afectan al usuario,
son una vía de denuncia o de exhibición de
situaciones que afectan a la sociedad. A través de
ellas se ha sabido de casos de prepotencia,
agresiones físicas a ciudadanos, abusos de poder,
noticias publicadas por distintos medios,
comentarios de periodistas, empresarios y jefes de
Estado, y se nos permiten conocer un sinfín de
temas.
Pero los usuarios de las redes sociales, al igual que
quienes comunican a través de los medios de
comunicación impresos y electrónicos, tienen una
gran responsabilidad. Un comentario sin sustento
puede implicar una violación a derechos de
13. Actualmente, muchas empresas monitorean el
perfil de las redes sociales de sus candidatos a
reclutar, aunque, según encuesta realizada por el
portal trabajando.com, las redes sociales también
se han transformado en un canal adicional a la hora
de buscar empleo.
Han creado políticas detalladas para el uso de las
redes sociales, con la esperanza de evitar
situaciones incómodas. Lo mismo señala el tipo de
contenido que establece guías para postear y
sugiere estilos de redacción, que hasta prohíbe el
uso del equipo de oficina para entrar a las redes
sociales. Algunos prohíben a sus empleados utilizar
sus cuentas personales para pronunciarse como
periodistas y otros suministran cuentas
14. Hay una regla que establece que las cuentas y mensajes
personales deben diferenciarse claramente de las cuentas
y mensajes institucionales, y que las redes sociales deben
aprovecharse para “promover y fortalecer la oferta del
Instituto”, y “no para lamentarse, quejarse, desahogarse,
burlarse o vilipendiar al propio Instituto”. El segundo
indica que el uso de las redes sociales vinculadas con el
canal debe hacerse de manera institucional y que sus
contenidos “deben apegarse estrictamente al Código de
Autorregulación Ética y al Manual de Estilo de Canal 22…”.
Visto así, las redes sociales parecen un arma de doble filo.
Pero trabajar en un medio –y especialmente en una
agencia de relaciones públicas– sin tener presencia en las
redes sociales, como lo reporté a fines del pasado mayo
en este blog, es desaprovechar un importante canal de
comunicación que puede resultar estratégico. Las redes
no sólo son fuente de información sino medio de difusión
de contenidos, y pueden contribuir al fortalecimiento de
una marca y a la interacción con los públicos de una
institución.
15. Una estrategia de comunicación en redes sociales
no es únicamente tener una página en Facebook o
un perfil en Twitter, sino lograr una mezcla
multimedia que permita un “diálogo” con los
públicos y capitalizar la retroalimentación por parte
de los usuarios de las redes. Lo importante, en
tiempos en que surge más información de la que
cualquiera puede procesar, es convertirse en
referente, ofrecer un valor agregado que invite a
ser seguido a través de contenidos planeados para
renovarse consistentemente con información
atractiva.
A fin de cuentas, sea por estrategia o por iniciativa
personal, es mejor pensar antes de publicar en las
redes sociales.