Este documento describe cómo las palabras inglesas han reemplazado muchas palabras en español en Uruguay, modernizando el lenguaje pero también cambiando las costumbres. Ya no se usan palabras como "biscochos" sino "cookies", la gente ya no viaja en "ómnibus" sino en "bus", y tienen jefes no sino "boss". El documento sugiere que aunque estas palabras suenan más modernas, también han influido en la identidad cultural uruguaya.