La ley establece la Renta Universal de Vejez (Renta Dignidad) en Bolivia, un beneficio no contributivo para todos los ciudadanos mayores de 60 años. La renta anual será de 2,400 bolivianos para aquellos sin otros ingresos, y 1,800 bolivianos para quienes también reciben una pensión. El fondo se financiará con el 30% de los ingresos del impuesto a los hidrocarburos y los dividendos de las empresas estatales. La ley entrará en vigor el 1 de enero de 2008.