Este documento describe las rivalidades locales y los esfuerzos por establecer un gobierno central en Costa Rica en las primeras décadas después de la independencia. Las principales provincias de Cartago, San José, Heredia y Alajuela competían por el poder y el estatus de capital. Esto llevó a dos guerras civiles en las que San José emergió victorioso y se estableció como la capital permanente. También se discuten los desafíos para crear una identidad nacional unificada durante este período.