El documento discute tres puntos importantes sobre la ciencia, el progreso y la calidad de vida. Primero, cada investigación científica debe enfocarse en el desarrollo humano integral. Segundo, la sociedad se ha vuelto demasiado comercial y las personas han perdido sus valores morales. Tercero, se necesita una "ciencia con conciencia" que utilice los avances de manera ética y respetuosa de la vida humana para mejorar el bienestar general y la calidad de vida.