La neumonía bacteriana causa inflamación de las vías respiratorias bajas y el parénquima pulmonar. Se diagnostica mediante signos clínicos, imágenes, análisis de laboratorio y lavados broncoalveolares. El tratamiento incluye oxígeno, antibióticos, fisioterapia, fluidos, nutrición y en algunos casos ventilación mecánica o cirugía. Los antibióticos se eligen dependiendo del agente bacteriano causante y se administran por varias semanas para asegurar