La obesidad es el quinto factor principal de riesgo de defunción humana en el mundo, causando al menos 2.8 millones de muertes anuales. Para prevenir la obesidad, se recomienda reducir las calorías, eliminar alimentos procesados y grasos, basar la dieta en plantas, carnes magras y productos lácteos bajos en grasas, y realizar entre 250-300 minutos de ejercicio moderado a la semana para perder peso de manera significativa.