Entre 1821 y 1856, México experimentó una inestabilidad política constante, con 41 presidentes en 31 años, la mayoría militares. La sociedad mexicana estaba dividida entre las clases dirigentes (comerciantes, terratenientes, militares, clero) y la población mayormente pobre, rural e iletrada. La economía dependía de la agricultura y la minería controladas por extranjeros, sin desarrollo industrial ni comercial debido a la falta de infraestructura, capital e inversión. Este periodo estuvo marcado por la