Los estudiantes del tercer grado crearon historietas con personajes y capítulos propios. Cada niño construyó un personaje protagonista de cartón y desarrolló el primer capítulo de su historia a través de imágenes. Algunos niños comentaron que las historietas son como libros pero siempre tienen dibujos, y que les gustaría que sus historias se lean en todo el mundo. El proyecto permitió a los niños contar historias reales o inventadas a través de escenarios y personajes propios.