Las políticas ambientales tienen un impacto en las empresas industriales que deben cumplir con normas internacionales, nacionales y locales para proteger el medio ambiente. Estas empresas deben monitorear la cantidad de residuos generados, considerar tercerizar el tratamiento de desechos, e implementar procesos de producción más ecológicos para evitar sanciones y proteger la salud pública.