La persona reflexiona sobre su forma de comunicarse, identificando que lo hace de manera asertiva, respetuosa y empática. Reconoce que no es tan organizada y que debe establecer metas y tiempos para evaluar su desempeño. Considera que las personas con las que se comunica la ven como alguien efectiva y respetuosa. Cree que factores como la personalidad influyen en su comunicación y que debe tomarse más tiempo para evaluarse a sí misma y establecer metas que le permitan mejorar como líder.