Los sistemas alimentarios en zonas montañosas semiáridas están en peligro debido al cambio climático. Los ecosistemas de montaña son especialmente vulnerables y las prácticas agrícolas deberán adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones climáticas. El cambio climático también amenaza la salud humana en Bolivia a través del aumento de enfermedades transmitidas por vectores, infecciosas y respiratorias.