El equilibrio químico es el estado en el que las concentraciones de los reactivos y productos no cambian con el tiempo a pesar de que las reacciones directa e inversa continúan ocurriendo a velocidades iguales. Para que haya equilibrio químico, las velocidades de las reacciones directa e inversa deben ser iguales de modo que no haya cambios netos en las concentraciones. Este estado también se conoce como equilibrio dinámico.