La revolución estudiantil de 1968 en Francia comenzó como protestas estudiantiles contra la sociedad de consumo y se extendió a incluir huelgas y manifestaciones obreras. A medida que las protestas crecían y se volvían más radicales, el gobierno cerró la Universidad de la Sorbona y otras instituciones. Finalmente, el presidente De Gaulle disolvió los grupos de extrema izquierda y llamó a elecciones anticipadas, lo que puso fin a la revolución estudiantil.