Las pruebas de ensayo evalúan habilidades como la organización, ejemplicación, explicación, comparación y justificación de conocimientos a través de preguntas abiertas. Requieren respuestas escritas que fundamenten la teoría y demuestren capacidades como la crítica, síntesis y razonamiento. Si bien ofrecen flexibilidad, su corrección es subjetiva y depende del corrector. Al elaborarlas se debe limitar el tipo de respuesta esperada para aumentar la fiabilidad.